En esta entrega del especial de la niñez abordaremos la niñez inclusiva, acá puedes leer la primera parte sobre niñez y diversidad esto desde los retos que implica el cuidado de niños, niñas, adolescentes o jóvenes con alguna situación de discapacidad y para ello nos reunimos con Wendy Becerra, coordinadora de servicio en Antioquia.
Retos de la familia para lograr una niñez inclusiva
Wendy Becerra, comparte desde su experiencia cuáles son los retos de las familias que acompañan a un niño o niña que tiene alguna discapacidad, son:
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Que la familia sea orientada para que comprenda la situación de discapacidad de la persona, hacerlo es fundamental para realizar un debido acompañamiento.
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Implementar estrategias para vincular a la niña o niño con discapacidad a acciones que impulsen todas las áreas del desarrollo, es decir que se incluya el desarrollo social, educativo y familiar.
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Evitar la sobreprotección, ya que hay casos en los que, por el miedo que se genera a partir de la discapacidad los cuidadores sobreprotegen. Esto es importante controlarlo, ya que en algún punto puede volverse una vulneración de derechos, como el debido desarrollo.
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Es indispensable generar un equilibrio para que el niño o niña pueda relacionarse con las distintas áreas de la vida, así como el tener las herramientas que le permitan impulsar su desarrollo e ir enfrentando situaciones por sí mismo.
Apoyar a las familias en las que crecen niños o niñas con alguna discapacidad
Un elemento clave que menciona Wendy Becerra es la importancia de apoyar y proteger a las familias en situación de vulnerabilidad, ya que esta situación puede ser un agravante ante casos de niños y niñas con alguna discapacidad.
Así mismo, resalta la importancia de que las familias tengan una disposición para activar las rutas de acompañamiento, como también que las instituciones den garantía de derechos básicos, como el derecho a la salud, y que no se dilaten los diagnósticos o tratamientos, ya que hacerlo es perjudicial para el niño o niña.
De la misma manera, el tema de la educación inclusiva debe partir de un reconocimiento, por parte de la familia, de cada caso particular, puesto que, como lo comenta Wendy, “es importante reconocer estos casos y crear estrategias pertinentes para no caer en desprotección o interrumpir el proceso de desarrollo”.
Igualmente, es un aspecto muy relevante en el apoyo a las familias, el que ellas cuenten con los recursos para que los niños y niñas que tienen alguna discapacidad crezcan en un entorno protector que asegure, por ejemplo, condiciones de habitabilidad, alimentación y que tengan acceso a los dispositivos de apoyo necesarios para mejorar su calidad de vida y la autosuficiencia de los niños y niñas.
La comunidad: una red de apoyo para la niñez inclusiva
Wendy Becerra también plantea un elemento importante dentro de los procesos de inclusión de niños y niñas con alguna discapacidad, y es que no solo la familia debe hacer un reconocimiento de las particularidades de la niña o niño, sino que este atañe directamente al ambiente social inmediato: la comunidad. .
Wendy Becerra, comenta, que esto es fundamental para crear una red de apoyo para la familia y para el niño y la niña, en ese sentido, comparte un ejemplo: “en un caso fue necesario hacer un ejercicio de socialización y sensibilización con los compañeros de estudio de una niña con discapacidad, para que se generará una relación de colaboración y comprensión hacia ella, previniendo y frenando actitudes de bullyng o exclusión”.
Recomendaciones para las familias con hijos o hijas con discapacidad
Wendy Becerra nos plantea una serie de recomendaciones para que las familias acompañen a un hijo/a con alguna discapacidad. Ella menciona:
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Activación de servicios de salud: es importante que las familias activen los servicios de salud para conocer la condición real del niño o niña, esto a través de un diagnóstico, ya que de esta forma podrán establecerse estrategias para acompañar los procesos de cuidado y desarrollo.
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Recibir orientación de especialistas: ello para que los especialistas puedan brindar información para que las familias incorporen comprendan entre todos los integrantes de la familia la condición del niño o la niña, así como se establezcan nuevas dinámicas familiares y reglas de convivencia y apoyo.
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Mantener canales de comunicación abierta: esto para que todos los integrantes de la familia tengan espacios para contar los temores que tienen, cómo los puede estar impactando, así como poder expresar las emociones que están viviendo.
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Prestar atención a los demás integrantes de la familia: si bien el hijo o hija que tienen esta condición suele requerir mayor atención, es indispensable equilibrar el cuidado y atención.
Acompañamiento a familias en procesos de inclusión
Aldeas Infantiles SOS a través de los servicios de fortalecimiento familiar, acogimiento y atención en emergencia, viene desarrollando metodologías de acompañamiento a población en condición de discapacidad. En el caso concreto del Programa de Antioquia, Wendy Becerra, comparte cómo el mayor reto en estos procesos de inclusión es entender la condición del niño, niña o adolescente para que, a partir de esa comprensión el equipo de profesionales avance en “pensarse estrategias que pueda facilitar proceso con familia, para que la persona con esta condición se sienta incluida; diseñar metodologías y actividades con el equipo de pedagogas que puedan responder a su condición y activar las rutas necesarias y acordes para la exigibilidad de derechos del niño, la niña y la familia”.