¿Cuál es la relación entre los derechos humanos y los derechos de la niñez?
diciembre 19 2024

¿Cuál es la relación entre los derechos humanos y los derechos de la niñez?

En esta ocasión nos reunimos con Alejandro Ruíz, asesor nacional de abogacía e incidencia política en Aldeas Infantiles SOS en Colombia para conocer más sobre los derechos de niñas y niños, en nuestro nuevo especial que aborda este tema fundamental para todas las sociedades. 

¿Qué son los derechos humanos y cuál es su relación con los derechos de la niñez? 

En 1946 se aprobó la declaración de los derechos humanos que amparó a todas las personas sin distinción de edad, sexo, religión, orientación sexual, ideología política o creencia religiosa.  En ese sentido, fueron la base para que las niñas y niños fueran reconocidos como sujetos de derechos sin que tuvieran que cumplir la condición de mayoría de edad. Lo sucedido en la Primera y Segunda Guerra Mundial hizo que la Asamblea General de Naciones Unidas reconociera y actuara frente a la violación de derechos que vivieron niñas y niños, tomando para ello en consideración la presentación de un instrumento que les protegiera de manera especial a, explica Alejandro Ruiz. 

Fue así que en 1989 los derechos humanos de la niñez se plasmaron en la Convención de los Derechos del Niño y la Niña, que es el instrumento más ratificado por los Estados en el mundo: de 194 países, 193 firmaron la Convención. El único país que no lo ha firmado es Estados Unidos.  

¿Cuál es la relación entre la Convención sobre los Derechos del Niño y la Niña, y la Declaración de los Derechos Humanos? 

En el segundo artículo de la Declaración de los Derechos Humanos se expresa que todos los seres humanos nacen libres e iguales, y que ese derecho a la igualdad debe evitar cualquier tipo de discriminación. También resalta derechos fundamentales como el derecho a la vida, a la libertad, a la seguridad y a ser tratados con dignidad. Estos ejes presentados en la Declaración serán los mismos principios de la Convención sobre los Derechos del Niño y la Niña. Además, allí se resaltan, específicamente, los derechos de la niñez como: crecer en una familia y una sociedad que los proteja; vivir en un ambiente amoroso, cuidador y que los reconozca tanto dentro de sus hogares como en los distintos escenarios sociales en los que se desenvuelven, entre otros. 

Es de este modo que la la Convención sobre los Derechos del Niño y la Niña se plantear como un instrumento que permita el desarrollo integral de niños, niñas y adolescentes en sociedades que garanticen y reconozcan sus derechos.   

¿Qué significa que un Estado haya suscrito a la Convención sobre los Derecho del Niño y la Niña? 

Según explica, Alejandro Ruíz, los Estados que suscribieron a esta Convención tienen la obligación de tomar todas las medidas posibles administrativas, financieras y políticas para que las niñas y niños se desarrollen plenamente. Aquello teniendo en cuenta que es la población más vulnerable en el mundo, ya que sufren violencia, maltrato, abuso sexual, tratos humillantes, trabajos forzados, entre otras violencias.  

¿Están siendo garantizados los derechos de las niñas y niños en Colombia? 

En la actualidad vemos que las niñas y niños siguen siendo una población vulnerable, y que sus derechos humanos no son garantizados, lo que incluye que vivan en situación de pobreza o que  no puedan acceder al derecho de la identidad al no tener un registro civil, lo que impide el acceso a otros derechos como la educación, salud y seguridad, afectando negativamente su desarrollo. “En Colombia, por ejemplo, esto está ocurriendo con las niñas y niños que nacieron en Venezuela o que nacieron en Colombia y sus padres son venezolanos, entonces es urgente dar respuesta a casos como estos, ya que se trata de un derecho importante y trascendental”, añade, Alejandro Ruiz.   

Frente a los derechos humanos relacionados con la seguridad y la supervivencia de niñas y niños estos están lejos de ser garantizados. Según Ruíz Colombia, por ejemplo, es uno de los países con mayor explotación sexual, comercial y trata de niños, niñas y adolescentes, debido en muchas ocasiones a la situación de riesgo y vulnerabilidad en la que viven las familias. 

Si bien Colombia cuenta con un componente legislativo y de políticas públicas adecuado, esto no se refleja en una eficiencia en la justicia, ni en la garantía de derechos de la niñez y las familias. Se requieren, por tanto estrategias de acción que se relacionan con la posibilidad de que las familias sean protegidas y se establezcan medidas para fortalecer sus posibilidades económicas y de desarrollo. 

Alejandro señala que el derecho a la educación de niñas y niños también es un derecho al que es necesario prestar atención, ya que en nuestro país la deserción escolar es alta, especialmente, en zonas rurales, por lo que se hace necesaria la implementación de programas y proyectos que eviten la deserción, esto incluirá tanto los programas curriculares como extracurriculares. Con estas medidas no solo se impulsa el desarrollo a través de la cultura, la educación y el deporte, sino que al mismo tiempo se mitigan situaciones de riesgo y vulneración de derechos, como el reclutamiento forzado o la explotación infantil. 

Adicionalmente, Alejandro Ruiz resalta que otro asunto fundamental es articular las respuestas a la deserción escolar, a través de planes de apoyo a las familias, ya que es necesario que las familias tengan acceso a una alimentación adecuada, a recursos para transportarse, para brindar herramientas educativas, ya que todo esto impactará en el proceso educativo de niñas y niños.  

Otro de los elementos que menciona Alejandro Ruiz, que inciden con la garantía del derecho a la educación es la presencia de grupos armados ilegales, ya que las escuelas son tomadas por estos, actualmente hay más de veinticinco colegios cerrados por esta razón, además, de ser una experiencia traumática cuando es tomado el espacio escolar por estos grupos. 

 

 

Aldeas Infantiles SOS es una ONG con presencia global. En Colombia trabaja en varias regiones del país donde brinda apoyo e impulsa los proyectos de vida en niñas, niños, adolescentes y jóvenes; así mismo fortalece las capacidades de cuidado, protección y crianza de familias en situaciones de vulnerabilidad.

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