¡Ir a la universidad ha sido una de las más grandes bendiciones para mí!
¡Ir a la universidad ha sido una de las más grandes bendiciones para mí! – febrero 29 2024

¡Ir a la universidad ha sido una de las más grandes bendiciones para mí!

“Desde que me gradué de la escuela y pasé los exámenes de admisión los días han sido increíbles. Yo soy la primera de mi familia en asistir, por eso me emociona dar lo mejor de mí en cada clase", cuenta Laura con una gran sonrisa. Te preguntarás ¿Qué estudia Laura? Ella estudia ingeniería de telecomunicaciones, y hace poco se graduó como técnica en programación. "Los números, la lógica y los cálculos matemáticos son lo mío, por eso no es tan difícil estudiar ambas cosas ¡me encantan!”, agrega Laura.

Elegir la carrera fue una de las aventuras más emocionantes. Laura es participante del programa de fortalecimiento familiar en Quibdó y desde hace tres años las “seños” la guían para identificar sus sueños, construir su proyecto de vida, aprender sobre sus derechos y trazar metas. Las charlas, los talleres y un gran examen de vocación le permitieron confirmar que la ingeniería es su camino.

Laura siempre había soñado con esta increíble experiencia, "estudiar es costoso, no es fácil, pero es mi sueño, por eso antes de graduarme le propuse a mi mamá que montáramos un emprendimiento, ahora tenemos una tiendita donde vendemos lo básico, esta nos ayuda para el diario y a ahorrar". Los esfuerzos han dado fruto y Laura inició su tercer semestre como ingeniera. Además de tener la emocionante oportunidad de aprender, le hace ilusión compartir esta increíble experiencia al lado de su mamá y hermanos menores.

Ahora, el momento más esperado por todos en la casa es: ¡prepararse para ir a estudiar! El día anterior, Laura revisa sin falta el calendario que tiene pegado detrás de la puerta, ella lo hace a mano y cada seis meses lo actualiza. Allí, revisa el horario de clases que tiene por día y así guarda sus cuadernos de notas. También empaca una memoria, la infaltable para visitar la oficina de Aldeas Infantiles SOS en Quibdó, pedir en préstamo un computador y hacer sus trabajos al finalizar clases.

Como en Quibdó puede llover en cualquier momento, Laura empaca una sombrilla y, por si acaso, un impermeable. Las mañanas son grises, "las nubes están bajitas y los sueños son grandes" como ella suele decir antes de salir. Todas las mañanas Laura emprende el camino en una gran canoa con motor, no sin antes mover su mano desde la distancia despidiéndose de su mamá y hermanos. A pesar de las dificultades del viaje bajo la lluvia, Laura disfruta cada momento, sabiendo que en la universidad descubrirá nuevas ideas y aprenderá sobre temas que la inspiran.

Su materia favorita es lógica de programación, desde que la descubrió Laura ha estado fascinada por el mundo de la informática, en sus clases se sumerge en el estudio de algoritmos y estructuras de datos. Su pasión la ha llevado más allá de las aulas; Laura ha aplicado sus conocimientos para crear programas informáticos prácticos para EPSs, participó en un bootcamp y allí diseñó un programa para cajeros automáticos. Asombroso, ¿cierto?

Estos logros son testimonio de sus habilidades y pasión por la innovación. Laura ve la informática como una herramienta para transformar la sociedad y hacer del mundo un lugar mejor. "Cuando mis compañeros me vieron por primera vez, muchos se sorprendieron. Algunos tenían la idea de que las mujeres no podían ser ingenieras. Sin embargo, ahora todos somos grandes amigos y nos apoyamos en el camino", comenta Laura.

¿Sabes qué es lo más gratificante para ella? Volver a casa para probar los deliciosos frijoles que prepara su mamá, contarle como estuvo el día, y ¿por qué no? Prestar un celular con minutos para decirle a la seño Milena de Aldeas que le fue muy bien en el trabajo que entregó. Para ella, crecer y recibir nuestro acompañamiento es una oportunidad única para salir adelante y ser un ejemplo a seguir para sus hermanos.