Lo que debes saber sobre el sistema de protección para la niñez en Colombia
marzo 20 2025

Lo que debes saber sobre el sistema de protección para la niñez en Colombia

La incertidumbre que muchas personas experimentan ante un posible caso de vulneración de los derechos de las niñas, niños, adolescentes y familias refleja la necesidad de conocer más a fondo los procesos de atención ante situaciones de desprotección.

Hablamos con Alejandro Ruíz, Asesor Nacional de Abogacía e Incidencia Política de Aldeas Infantiles SOS, quien nos compartió algunos puntos clave sobre el sistema de protección y los procesos de protección en Colombia y el mundo.

¿Qué es un sistema de protección?

Es el conjunto de leyes, políticas, procedimientos y prácticas destinadas a la prevención y protección frente a cualquier tipo de maltrato, violencias y/o discriminación de las niñas, niños y adolescentes.

Es importante aclarar que según las directrices internacionales establecidas por el Comité de los Derechos del Niño (CDN) y por la Comisión Interamericana de Derechos (CID), para que exista un sistema de protección es necesario que los países cumplan con unos estándares que incluyen: 1) una política de infancia y adolescencia (con una estructura interinstitucional que garantice que esta política se cumpla) y 2) recursos públicos para garantizar los derechos de la niñez.

Según lo anterior, Alejandro Ruíz indica que en Colombia existe un proceso de protección que traza la ruta para abrir un proceso administrativo de restablecimiento de derechos (PARD) ante cualquier posible vulneración de los derechos de las niñas, niños y adolescentes, pero no está consolidado un sistema de protección tal como lo indica la CDN y la CID.

¿Qué entidades se encargan de estos procesos de protección?

En Colombia las entidades competentes para abrir este proceso administrativo son: el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF); las Defensorías de Familia o las Comisarías de Familia. En aquellos municipios donde no hay Defensorías ni Comisarías de Familia, son los inspectores de policía quienes deben abrir el proceso administrativo de restablecimiento de derechos.

En el caso particular de Bogotá, son las comisarías de familia (adscritas a la Secretaría Distrital de Integración Social) las entidades que trabajan para la protección de derechos fundamentales en el contexto familiar, especialmente cuando las víctimas son sujetos de protección especial como las niñas, niños, adolescentes, mujeres y personas mayores.

¿Cuál es el proceso que debe pasar un niño o niña cuando ingresa al sistema de protección?

Antes de abrir un proceso administrativo de restablecimiento de derechos, es necesario que un equipo psicosocial realice una valoración a la niña, niño o adolescente para determinar si se le han amenazado o vulnerado sus derechos. Si en esa valoración se determina que hay una vulneración de cualquier tipo (bienestar humano, salud mental, nutrición, entre otros) se abre el proceso administrativo de restablecimiento de derechos en el que se cita a la familia a una audiencia para esclarecer cuál es la situación que presenta el niño y/o la familia.

Luego de esto, la autoridad administrativa (Bienestar Familiar, Comisaría de Familia o Inspector) dicta unas medidas para proteger y restablecer los derechos de la niña, niño o adolescente en términos de dignidad y también dicta unas medidas para fortalecer las capacidades de cuidado familiar.

La ley en Colombia establece que este proceso de fortalecimiento puede durar en su etapa inicial seis (6) meses, pero puede extenderse hasta dieciocho (18) meses. Una vez se cumple este tiempo, la autoridad administrativa debe tomar una decisión para determinar si la niña, niño o adolescente va a ser reintegrado a su núcleo familiar (en caso de que las capacidades de cuidado se hayan fortalecido exitosamente) o si es necesario iniciar un proceso de adopción.

En un mundo ideal ¿qué debería pasar cuando un niño, niño o adolescente ingresa a un sistema de protección?

Lo que debería pasar es que se concentren todos los esfuerzos en fortalecer las capacidades de cuidado de las familias paralelamente a la medida de protección que se tome para reestablecer los derechos de la niña, niño o adolescente.

Esto con el objetivo de orientar a las familias en cuanto a pautas de crianza, formas de sanción sin castigo físico, formas de establecer normas de disciplina y compromisos. Además de favorecer otras capacidades para conseguir la inclusión productiva a través de emprendimientos y de complementar sus ingresos con el acceso a los subsidios estatales (como renta ciudadana, afiliación a salud y educación). Sumado a lo anterior, se trabaja con las familias con un enfoque diferencial y de género que fortalece su conocimiento sobre los derechos de la mujer, los derechos de las niñas, niños y adolescentes, entre otros.

Es indispensable empoderar a las familias para que efectivamente sean entornos protectores y seguros para que las niñas, niños y adolescentes se desarrollen integralmente.

¿Cómo contribuimos desde Aldeas Infantiles a que se brinde atención de calidad a niñas niños, adolescentes y familias que lo necesitan?

Hemos aportado diferentes elementos técnicos para la construcción de la política nacional de la infancia y adolescencia 2018-2030. También hicimos incidencia para que esta política se aprobara mediante la Ley 2328 del 2023. Esto está contribuyendo a que se consoliden los elementos necesarios para que se pueda llegar a conformar el sistema de protección. Adicionalmente, hemos insistido en la reforma a la arquitectura interinstitucional para que haya un órgano rector que exija a los ministerios que cumplan con toda la legislación para garantizar los derechos de las niñas, niños y adolescentes.

Como representantes de la sociedad civil ante el Sistema Colombiano de Bienestar Familiar hemos insistido en que el gasto público priorizado se destine a favor de la infancia y la adolescencia de manera prevalente.

Aldeas Infantiles SOS es una ONG con presencia global. En Colombia trabaja en varias regiones del país donde brinda apoyo e impulsa los proyectos de vida en niñas, niños, adolescentes y jóvenes; así mismo fortalece las capacidades de cuidado, protección y crianza de familias en situaciones de vulnerabilidad.

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