Hoy damos comienzo al especial de Familia y comunicación, en esta ocasión nos reunimos con Ángela Giraldo quien es coordinadora nacional de formación, para iniciar nuestro especial con qué es la comunicación familiar, qué indica una buena comunicación familiar, cuáles son los beneficios y cómo lograr una comunicación positiva. 

¿Qué es la comunicación familiar? 

Angela Giraldo nos cuenta que la comunicación familiar es el proceso de interacción que se da entre los integrantes de un hogar, así mismo, el hogar es el espacio donde transcurre la vida cotidiana de sus integrantes, allí avanza el desarrollo de los niños y niñas, de la adecuada comunicación que se dé al interior de esta, depende las relaciones que se establecen a lo largo de la vida, ya que es el medio por el cual nos  expresamos o comprendemos lo que los demás piensan y sienten, de igual manera es el medio por el cual nos unimos y vinculamos. 

¿Cuál es la importancia de la buena comunicación familiar? 

Angela nos dice al respecto que cuando existe la adecuada comunicación en una familia, se podría asegurar que es una familia que vive en un ambiente de unión y afecto en el hogar, que se esfuerza por establecer vínculos sanos y fuertes entre sus integrantes, donde se reconoce la individualidad del otro/a, donde se vive en medio del respeto y el cuidado mutuo. 

¿Cuáles son los beneficios de tener una adecuada comunicación familiar? 

Una eficaz comunicación al interior de la familia es muy importante para mantener buenas relaciones, así mismo, los padres y las madres que se comunican adecuadamente con sus hijos e hijas desde el momento de la gestación, envían mensajes que, siendo positivos (el deseo, la aceptación de ese nuevo ser), estimulan el adecuado desarrollo prenatal. 

Así mismo, en la primera infancia, la comunicación estimula el desarrollo del lenguaje y, por ende, el desarrollo cognitivo, ya que, a través de la expresión del afecto, el dialogo y la escucha, se estimula y promueve el desarrollo emocional y social, fortaleciendo valores como la autoconfianza, la seguridad y el aprendizaje a medio y largo plazo. 

Sin embargo, hay que recordar que la comunicación no solamente es “hablar por hablar”, sino que también intervienen otros elementos con los que nos comunicamos, como nuestros gestos, silencios, tonos de voz, postura, etc. 

Por ello podríamos decir como beneficios que, cuando existe una buena comunicación con los hijos e hijas, se muestran más abiertos a recibir enseñanzas, a compartir con los padres y las madres sus problemas, aprenden a expresar sus sentimientos, actitudes y deseos y aprenden a establecer relaciones satisfactorias con otras personas. Hay que recordar que el ejemplo es otra forma de comunicar, por lo que una sana relación de pareja, basada en la comunicación y el respeto, proyecta un mensaje coherente a los hijos e hijas. 

¿Cómo lograr una comunicación asertiva? 

Para lograr una comunicación asertiva es necesario poder expresar nuestros sentimientos con claridad, igualmente, es muy importante validar y reconocer las emociones y estados de ánimo de quienes integran la familia, incluir durante el día a día preguntas como:  

• ¿Cómo te sientes? - ¿Qué es lo que te preocupa? - ¿Qué es lo que te molesta? - ¿Estás de acuerdo? - ¿Por qué reaccionas de cierta manera?  

Preguntas como estas, promueven el dialogo abierto y sincero, reconocen que lo que está sintiendo y pensando la otra persona, es importante; es clave, así mismo, dar el tiempo y permitir que cada persona se exprese con tranquilidad y ponga sus puntos de vista, ya que eso promoverá  una conversación respetuosa y equilibrada.