Hacia un periodismo respetuoso de los derechos de los niños y las niñas

Hoy se conmemora el Día del Periodista en Colombia, con motivo de la publicación del primer periódico del país, el “Papel Periódico de la Ciudad de Santafé de Bogotá”, un 9 de febrero, hace 231 años.

Por un periodismo a favor de los derechos de niños, niñas y adolescentes

Esta es una fecha especial para destacar y resaltar la loable labor de los comunicadores y los medios de comunicación en el servicio que le pueden brindar a una comunidad bien informada, pero también es una oportunidad para recordar la responsabilidad que tienen ante la sociedad con el correcto manejo de lo que informan.

Así mismo, es un momento adecuado para recordar lo que la ley en Colombia solicita a los medios de comunicación en relación a la niñez, según la ley de Infancia y adolescencia 1098 del 2006 en su artículo 47, “la invitación para los medios de comunicación -en el ejercicio de su autonomía y demás derechos- debe ser la de promover, mediante la difusión de información, los derechos y libertades de los niños, las niñas y los adolescentes, así como su bienestar social y su salud física y mental”.

Un periodismo que tenga una especial atención por los derechos de la niñez

En un mundo donde predominan las noticias digitales que generan mayor cantidad de likes, se hace fundamental destacar que la información relacionada con los niños y las niñas deben tener una especial atención que priorice la protección de sus derechos.

En ese sentido, por ejemplo, los medios de comunicación deben adoptar políticas para la difusión de información sobre niños, niñas y adolescentes en las cuales se tenga presente el carácter prevalente de sus derechos y abstenerse de entrevistar, dar el nombre, divulgar datos que revelen o que puedan conducir a la identificación de niños, niñas y adolescentes que hayan sido víctimas, autores o testigos de hechos delictivos.

Un adecuado manejo de la información: imprescindible para proteger la infancia

Es primordial que haya una autorregulación en el lenguaje y el manejo de imágenes –no desde la autocensura sino desde el ejercicio responsable con los más vulnerables- para ayudar a proteger a la infancia. La dignidad de los niños y niñas debe prevalecer siempre por encima de cualquier tratamiento que se le dé a una noticia.

De la misma manera, el lenguaje utilizado a la hora de cubrir un hecho noticioso relacionado con niños y niñas debe orientarse hacia el reconocimiento de su posición prevalente en la sociedad. Términos como menor, delincuente, prostitución infantil, menores infractores, niños de la calle, discapacitados, entre otros; deben eliminarse de la jerga periodística, ya que primero debe prevalecer la dignidad de la persona y luego su condición. Por ende, una forma correcta sería hablar de menores de edad, niños en situación de calle, en situación de discapacidad, de explotación sexual o de abuso.

Los periodistas y los medios de comunicación son actores claves en el reconocimiento y protección de los derechos de la niñez en Colombia, y su ejercicio profesional hay que destacarlo y felicitarlo, porque la gran mayoría lo hace correctamente. Pero que sea esta una ocasión para recordar que siempre podemos hacer las cosas mejor para garantizar la dignidad y la no revictimización de los niños y niñas de nuestro país.