‘’Un mundo sin violencia es un mundo libre’’
Un mundo sin violencia – agosto 8 2016

‘’Un mundo sin violencia es un mundo libre’’

Estas fueron las palabras de Ramón Ayala, un joven de Aldeas Infantiles SOS Paraguay que representó a los niños, niñas y jóvenes de Latinoamérica y el Caribe en el lanzamiento de la Alianza Global para poner fin a la violencia.

Esta alianza cuenta con la presencia de varios países y organizaciones que abogan por los derechos de la infancia, entre las cuales se encuentran: ChildFund Alliance, World Visión, Save the Children, Plan Internacional, UNICEF y Aldeas Infantiles SOS. Estas organizaciones manifiestan que ningún tipo de violencia contra la niñez es justificable y que todos los tipos de violencia se pueden prevenir.

El 12 de julio en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York, Ramón tomó la palabra y se dirigió a los diferentes líderes mundiales. Pidió un verdadero mundo sin violencia donde se protejan a los niños y jóvenes y lamentó que la violencia hacia la niñez no sea un tema nuevo sino recurrente.



Ramón expresando sus propuestas

Te compartimos las palabras de Ramón:

“Es importante reconocer los esfuerzos que está realizando la alianza, al tenernos en cuenta, desde las consultas que se realizaron y con nuestra presencia en este evento.

Queremos que los acuerdos que se lleven a cabo sean asumidos por los gobiernos con acciones claras. Ya no queremos letras muertas.

El problema de la violencia a la niñez ya no es una noticia nueva; sabemos a diario de muchas violaciones a nuestros derechos en todo el mundo. No entendemos: ¿por qué seguimos siendo invisibles para los gobiernos?, ¿por qué siguen pensando que somos objetos y no sujetos? Ya estamos cansados de lindas intenciones, de firmas de convenios, y de acuerdos para la foto, mientras que nosotros seguimos siendo víctimas de violencia.

Existen millones de niños, niñas y adolescentes víctimas de las guerras, la esclavitud, la explotación y el abuso sexual. Hay otros miles que crecen en instituciones y no tienen garantizado su derecho a la familia. Desde nuestro punto de vista, la garantía de los derechos no es negociable; los países deben proteger a los niños, niñas y adolescentes sí o sí.


Y como frase final, esto le dejo a los gobiernos y al mundo entero: ya no queremos que el miedo, el hambre, la esclavitud y la violencia, formen parte de nuestra experiencia. Por eso, gobiernos y organizaciones civiles: no hagan tantas afirmaciones sino más acciones, para que nos abran las puertas hacia un verdadero mundo sin violencia; y eso es un mundo libre’’.