Conoce en este artículo sobre cómo cultivar en casa la protección infantil, qué debes tener en cuenta para convertirte en una persona de confianza, así como cuáles son actitudes protectoras.
¿Qué debe hacerse para cultivar en casa la protección infantil?
Para asegurar la protección infantil dentro del hogar son fundamentales dos aspectos:
-Generar acuerdos con niños y niñas: para establecer las normas de convivencia, así como los compromisos dentro de la familia. Es importante ser consecuentes con estos acuerdos para orientar, así como guiar a las hijas e hijos.
-Ser coherentes con los que queremos lograr: es necesario que como cuidadores, madres y padres seamos coherentes con el ambiente de protección que queremos lograr, por ello, pensar e implementar alternativas que frenen e eliminen las prácticas violentas y agresivas como los gritos, los golpes o una autoridad que infunda miedo.
La protección infantil: garantizar seguridad física y emocional
Así mismo para lograr que un hogar logre la protección infantil es necesario:
Garantizar seguridad física: revisando qué tan segura es la casa, por ejemplo, verificando que no haya vidrios rotos, cables pelados, así como no haya espacios inseguros como albercas, u hornillas. También esta garantía tiene que ver con asegurar que la niña o niño sienta que es su casa y encuentre allí un lugar de seguridad, bienestar y plenitud.
Garantizar seguridad emocional: asegurando un ambiente cálido y empático al interior del hogar, donde se reconocen sus logros, y se demuestran al niño o niña el cariño a través de contacto físico, detalles y palabras. Se debe tener en cuenta que con cada hijo/a se construye un vínculo distinto, por eso es importante conectarse con la particularidad de cada niña o niño. Para asegurar esta seguridad emocional es necesario apoyarlos/las, resaltando que siempre se creerá en ello/as.
Actitudes protectoras para cultivar la protección infantil en casa
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Cuando los niños o niñas cometen errores merecen ser orientados con cariño y amor.
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Bríndales un ambiente donde puedan expresar libremente lo qué piensan, lo que les pasa y aquello con lo que no están de acuerdo.
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Cada integrante de la familia merece respeto y amor, así como un trato igualitario.
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Enseña a mantener los espacios limpios y organizados, al igual que a organizar el tiempo según las tareas y los momentos de descanso.
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Enseña a cuidar y valorar su cuerpo y el de los demás.
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Haz que las experiencias de su vida sean respetadas y valoradas.
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Muestra interés por el cuidado, acompañando ante momentos de enfermedad o estrés.
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Acompaña las actividades del estudio.
Sé una persona de confianza
Una de las recomendaciones fundamentales para cultivar en casa la protección infantil es que cada hogar tenga una persona de confianza, que será quien escuche y brinde apoyo y protección cuando algo le preocupa a niñas o niños, quienes buscarán su ayuda para sentirse protegidos/as y que se cumplen sus derechos.
¿Cómo ser una persona de confianza dentro del hogar?
Otro de los elementos fundamentales para asegurar la protección infantil dentro de la casa es que la niña o niño sienta un vínculo de confianza. Para ser una persona de confianza ten en cuenta:
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Tomar en serio sus preocupaciones en torno a su seguridad e integridad y no dudar de él o ella.
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Hacer saber a cada niña o niño qué hacer frente a una situación de abuso físico, emocional, sexual o negligencia. Haciendo énfasis en que el abuso infantil no es aceptable o tolerable bajo ningún motivo.