El juego durante la niñez: ¿Cómo superar los estereotipos de género? 

¿Te has puesto a pensar si alguna vez le has dicho a una niña que no juegue fútbol? O ¿decirle a un niño que no juegue a la cocinita porque es un juego de niñas? Sin notarlo, muchas veces dentro de nuestra cotidianidad se replican y reproducen estereotipos y estructuras de género, esto lo vemos tanto en familias, como en colegios, jardines y comunidades, es así que resulta necesario superar dichas nociones y apostar por un juego libre de estereotipos y caracterizado por la igualdad. 

Y es que el juego es uno de los momentos fundamentales de socialización durante la niñez, por ello, resulta una oportunidad para que ellas y ellos exploren su identidad, se relacionen con otras personas y exploren sus intereses, gustos y afinidades. 

Por ello, te damos 6 consejos para que el juego esté libre de estereotipos: 

• Fuera de juego los estereotipos de género: evita catalogar los juegos en binarismos de género como “juego de niñas” o “juego de niños”, así mismo, no catalogues lo juguetes de un género u otro, en lugar de ello ofrece oportunidad para que exploren distintos juegos desde una mirada igualitaria, cooperativa y que los lleve a elegir y conocer sus gustos. 

• Un tiempo igualitario: establece acuerdos para que tanto niños como niñas tengan el mismo tiempo en las labores de la casa como en el tiempo de juego. Es importante que resaltes que el cuidado es responsabilidad de todos los integrantes de la familia y evites usar expresiones como “ayudarle a mamá con las tareas”, “aligerar las responsabilidades de mamá”, entre otras, para referirse a tareas de cuidado o domésticas. 

• 1 2 3 porque los juicios queden fuera: destaca sus particularidades, destrezas y habilidades pero sin hacerlo basado en una etiqueta de género, recuerda que decir: fuerte, sensible, delicado, estratégico, y tantos otros, son adjetivos que pueden nombrar tanto a niños como a niñas en distintos juegos, por ello, evita considerar las relaciones entre juego y roles masculinizados o feminizados, por ejemplo, evita decir “qué fuerte está, juega como un niño, pese a todo la pasa bien” en lugar de ello pon el foco en sus habilidades como “que bien juega al fútbol, es fuerte y la pasa bien”. 

• Un abanico de posibilidades: impulsa espacios de juego tanto al aire libre como en casa, busca diversificar los espacios sociales para que niñas y niños tengan la oportunidad de vivir diferentes experiencias de acuerdo a espacios privados y públicos. Así mismo, impulsa el desarrollo de distintas capacidades como la lectura, el relacionamiento espacial y estratégico, la resolución de problemas o situaciones y actividades para potenciar la creatividad. 

• Sé incluyente y guía hacia un juego cooperativo: usa un lenguaje inclusivo, así como una comunicación desde la igualdad, es necesario hacer sentir a cada niña y niño de forma cómoda, evita las crear jerarquías de valor entre ellas y ellos. Incluye historias y material que cuenten historias desde la igualdad, el respeto a las diferencias y la diversidad, serán perfectos cuentos o tramas que transmitan las distintas experiencias de las personas, tanto por razones de género, como por razones culturales, religiosas, entre otras. Que estos cuentos, canciones, poemas o imágenes sean ejemplos de representaciones de género diversas, variadas y libres de jerarquías. 

• Alimenta la igualdad: el juego irá siendo un laboratorio, donde niños y niñas juegan juegos de roles, asumiendo comportamientos, profesiones, relaciones entre pares, en este punto es importante que acompañes para que dentro de estos juegos dejen de masculinarse ciertas profesiones y áreas de la ciencia, la ingeniería o arquitectura, así como evita que se feminicen ciertas profesiones y áreas como la enfermería, la educación, o el cuidado, en lugar de ello que sea una oportunidad para que niñas y niños jueguen desde distintas posibilidades, no los restrinjas a un rol o profesión por  una división dada por el género. 

La igualdad empieza también en el juego: permite que niñas y niños accedan a un mundo abierto, lleno de posibilidades y escenarios, eso favorecerá tanto su autonomía, pensamiento crítico como impulsará una sociedad cada vez más igualitaria y democrática donde niñas y niños tengan las mismas oportunidades y sus derechos sean garantizados. 

En Aldeas Infantiles SOS en Colombia creemos en la igualdad de género como uno de los pilares para que la niñez crezca en hogares democráticos, cuidadores y protectores. 

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